No hay duda de que esta ha sido la caza de tormentas más intensa que he vivido. Es un detalle importante para comenzar ya que de camino a Zaragoza notaba que no estaba en las mejores condiciones de descanso para afrontar lo que me esperaba.
Sobre las 10 de la mañana salía de Barcelona con varias horas de viaje para situarme en la zona que había planificado la noche anterior. Dediqué demasiado tiempo a consultar todos los mapas que pude ya que la ocasión lo merecía, pero esto me supuso menos de 6h de sueño de las cuales poco más de 4 fueron de utilidad. Me costó conciliar el sueño repasando mentalmente algunas de las incontables opciones que se podrían dar y la estrategia a seguir en cada caso.
Sobre las 13:30h estaba ya en las afueras de la capital aragonesa y me engañaría si negase que notaba cierta desilusión. Por lo que mostraba el radar me esperaba ver unos desarrollos imponentes y lo que veía tenía un dudoso interés fotográfico. Además me llegaban informaciones de otros cazatormentas que ya estaban obteniendo resultados de alguna de las tormentas más tempranas. Con este panorama decidí atacar a la tormenta más próxima a Zaragoza. Varios núcleos descargaban con fuerza entre Zaragoza y Soria desplazándose al NE y se generaban más desde la provincia de Guadalajara. Uno de los más potentes pasaba por el Oeste de Zaragoza y en algún momento, antes de Huesca, debería cruzar la A23.
Minutos antes de las 14h estaba junto a una granja en Villanueva de Gállego, una ubicación que según el radar debería ser buena pero yo seguía siendo escéptico. No me dio tiempo ni para comer cuando empezó a asomar un arcus considerable. Poco antes ni se apreciaba debido a la oscuridad de la base.
Este fue el punto de inflexión en lo que respecta a mis sensaciones. Varios rayos CG caían al norte, en la zona de precipitación, y yo cada vez tenía más cerca el arcus y por detrás asomaba una zona muy baja de condensación.
No me queda claro si eso era el Wallcloud ya que todo venía muy caótico y cambiaba muy rápido. Creo que la tormenta estaba en fase de colapso ya que tampoco pude identificar una rotación clara.
Unos minutos después comenzaba a soplar un viento muy intenso, probablemente del frente de racha, que levantaba grandes cantidades de polvo. Incluso llegaron a formarse varios gustnados muy efímeros. El más contundente, al norte de mi posición, duró cerca de 1 minuto.
La estructura era imponente. Y además el viento frio proveniente de la tormenta y mezclado con las primeras gotas... Parecía que en cualquier momento podría pasar algo muy gordo.
En el desplazamiento de la tormenta hacia el Norte me pasó por encima la zona de condensación baja y no podía creerlo. Todo se movía con una violencia que jamás había visto. Y lo mejor, los contrastes y colores que había adquirido eran indescriptibles. Si no fuera por las fotos...
Además seguía el viento fuerte y los arrastres de polvo eran un espectáculo.
En un momento comenzó a descender una columna de condensación y pensaba que se armaba. Esta parte la tengo en vídeo. La siguiente imagen es un fotograma del momento en que llegó más abajo. En la secuencia no se aprecia una rotación clara por lo que probablemente sólo sea condensación.
Cuando parecía que no llegaría a nada dejé de grabar, tiré un par de fotos más y a perseguirla en su camino hacia el NE.
Por la A23 en dirección Norte me cayó lo que no está en los escritos. Era sólo agua pero muchísima, apenas veía las luces de los vehículos de delante a unos 20m y el viento lateral daba miedo. Las curvas a la derecha iban bien porque me alineaba con el viento, pero a la izquierda el coche no quería trazar. La carretera saturada de agua tampoco ayudaba. Finalmente en Zuera salí de la autovía ya que era imposible seguir. El viento había tirado un camión pequeño a la mediana unos km antes y aquello ya era preocupante. En Zuera las calles estaban inundadas y parecían ríos. Era difícil hacer nada en esas condiciones así que me tomé unos minutos para analizar la situación y parecía que por el Sur las tormentas adquirían buenas reflectividades, así que, volví a bajar a Zaragoza para intentar interceptarlas en la NII. Puesto que se movían con el mismo patrón era fácil ponerse delante y esperar a que pasasen para tener a la vista la zona del mesociclón, si lo había. O al menos eso pensaba.
A la altura de Nuez de Ebro ya estaba metido en la lluvia y comenzaban a caer algunos granizos, los más grandes del tamaño de garbanzos. Se estaba complicando mi plan porque hacia el Oeste todo era precipitación, así que, la única zona libre quedaba al Este y hacia el SE. La forma más rápida de adelantarme era seguir por la NII hacia el Oeste y eso hice. El viento soplaba muy fuerte pero en esta ocasión las corrientes apuntaban hacia la tormenta y cada vez me caían piedras más grandes. Poco después de Villafranca de Ebro algunos vehículos ya se paraban bajo los puentes para evitar daños pero yo sabía que a un par de km estaba el final y sólo pensaba en llegar. Y no. Acabé refugiado junto a un arbusto que me tapaba de algunos golpes. Imagen de algunos granizos que pude recoger abriendo un poco la puerta del coche. Era imposible salir.
En un par de minutos reanudo la marcha para volver a parar en un camino a unos 400m. Otra vez piedras grandes. Los camiones ya se quedaban parados en el arcén. Instantes después comienzan a caer piedras muy grandes y no tenía nada que me hiciera de barrera así que vuelvo a moverme hacia el Este hasta una gasolinera en la entrada de Osera de Ebro. Toda la zona cubierta de repostaje estaba llena de coches. Tuve que pegarme a una pared evitando la mayoría de impactos y también aproveché para recoger algunas piedras junto al coche.
Lo estaba pasando relativamente bien pero sabía que lo pasaría mejor saliendo de ese infierno y nuevamente me metí en la carretera. Parecía que había dejado atrás la zona de granizo grande pero me comí otra con mucha más lluvia, granizo de 1 o 2cm abundante y las ráfagas de viento más intensas. Sólo recorrí unos metros hasta parar en Osera de Ebro para volver a refugiarme tras un susto que casi me saca de la carretera. Aun así sufría más por si algún remolque de los camiones parados en el arcén de la carretera volcaba a mi paso. Desde un portal en Osera hice algunos vídeos en los que se aprecia la violencia del viento y de la precipitación. Costaba horrores cerrar la puerta del coche cuando volví a entrar.
Al bajar un poco la intensidad del viento reemprendo la marcha y a mitad de camino entre Osera y Bujaraloz consigo salir de la precipitación y la imagen era preciosa. Otra tormenta colapsando formando un downburst y a la derecha la espesa capa de lluvia y granizo que acababa de atravesar y que se me tiraba encima. Además, a la izquierda de la imagen se había formado un gustnado bastante persistente. Pude hacer 4 fotos desde un área de descanso.
Este sistema de tormentas que se había formado al Sur de Zaragoza lanzaba la precipitación hacia el N-NE pero se iba regenerando hacia el Este paralelo a la NII pero unos km al Sur. O mejor dicho, parecía que las corrientes ascendentes más potentes seguían el cauce del Ebro. No sé lo que hubiera dado por estar en esa zona pero no había previsto ese cambio y además las carreteras son muy malas por la Ribera Baja y no me las conozco. Sin tiempo para nada más vuelvo al coche para intentar seguir moviéndome por delante de la precipitación pero vuelvo a meterme en otra granizada. El viento volvía a ser fuerte de Norte y pude parar para tomar alguna imagen más, sin salir del coche, de lo que tenía hacia el Sur.
A 9km de Bujaraloz vuelvo a parar en otra gasolinera. Curiosamente estaba casi vacía y empezaban a caer algunas piedras casi sin lluvia. A cubierto bajo la zona de surtidores identifiqué algunas de las más grandes que tenía cerca y fuí a buscarlas... La broma me costó un bolazo en el hombro y otro en el costado. Estas ya llegaban a los 5cm o incluso algo más y ni mucho menos eran tan grandes como las que me habían golpeado con anterioridad.
Daba la sensación de haber pasado ya lo más gordo pero aun así seguí hacia el Este para intentar llegar a Fraga y desde allí planificar el siguiente movimiento. Poco antes de llegar me paré absolutamente extenuado. Eran las 16:45h y llevaba unas 2h bajo el granizo y el viento, intentando escapar y coger una buena posición. En ese momento ya me daba igual lo que me cayese y por suerte sólo fue un chubasco intenso pero corto. La tormenta se había desplazado más hacia el Sur siguiendo el Ebro y a mí sólo me llegaban los restos. Estuve revisando un poco las actualizaciones de modelos para ver que podría esperar sobre todo pensando en que la noche sería larga. En el radar no parecía que tuviera nada a tiro. Algún núcleo pequeño se movía hacia el N de Lleida pero por otra parte, la zona más inestable para las próximas horas estaría entre Castellón, Sur de Lleida y Barcelona. Decidí ir hacia Gandesa ya que conozco algunos puntos elevados en parque eólicos y alguna ermita por la zona, y además hay buena comunicación con Tarragona al SE, Tortosa al Sur y Alcañiz al Oeste. Aprovechando la pausa intenté visitar algunos sitios que tenía localizados como buenas ubicaciones al Sur de Lleida pero no sé cómo acabé en una carretera espantosa y encontré una ermita entre Torres de Segre y Sunyer. El sitio era precioso, elevado, con vistas a todos los campos de frutales, buenos horizontes y buenos accesos. Era el momento de tomarse un descanso ya que no podía más. Me di una vuelta por la zona mientras por fin comía algo. Eran las 6 de la tarde y estaba dispuesto a echarme una siestecilla después del bocadillo. Y mientras estos pensamientos me rondaban veo cómo se va oscureciendo el cielo por el NE. Me acerco al extremo que mejores vistas tiene hacia esa zona y cae un rayo espectacular a lo lejos. Sin pensármelo voy corriendo hasta el coche y me sitúo en el camino de acceso con vista libre hacia la tormenta. Entre que estaba con medio pie en el mundo de los sueños y la desorientación hasta llegar a la ermita no me esperaba lo que se me venía encima. El radar tampoco mostraba todavía nada destacable pero a lo lejos ya se empezaba a intuir alguna cosa. Eran las 19:10h.
Se estaba formando un arcus bastante rápido y venía directo hacia mí. No me lo podía creer. Hice algunas panorámicas y me puse a intentar capturar algún rayo disparando el obturador cuando veía el destello. Si, se lo que estáis pensando. Pero duraba tanto la descarga que pronto había cazado el primero.
Luego puse el resto de cámaras para intentar obtener suficientes imágenes para montar un timelapse y algun rayo en vídeo. Esta es la secuencia del acercamiento.
La panorámica completa.
Y un par de rayos más cuando ya tenía el diluvio casi encima.
Para no variar mucho, esta tormenta también venía con ráfagas de viento muy intensas que provocaron un incidente múltiple. Mientras intentaba capturar el último rayo antes de recoger el equipo, la cámara del timelapse acabó por los suelos. Desmonté la que tenía entre manos para evitar más daños y fui a recoger la del suelo y en ese momento el viento tiró el trípode con el que estaba intentando pillar rayos contra el trípode que aguantaba la cámara de vídeo, que también acabó en el suelo, o mejor dicho, en unos matorrales, afortunadamente. 19:30h
Una vez en el coche reviso que todo está bien y busco la manera de ponerme a cubierto. El viento lanzaba granizos pequeños con mucha violencia y la lluvia no dejaba ver nada. Además, acababa de descubrir el sitio y no sabía muy bien como salir de allí. Puse el coche a cubierto junto a unos pinos hasta que vi la oportunidad de moverme hasta el aparcamiento de la ermita. Sólo podía esperar a que pasase y grabar algunos vídeos del momento. Pasé algún momento duro que me hizo orientar el morro del coche contra el viento, pero finalmente acabó aflojando. Tenía que volver a Lleida para intentar seguir la tormenta hacia el Este o ya posicionarme en algún sitio para la noche. Obviamente ya no iba a ir a Gandesa.
Las carreteras habían quedado muy complicadas con la lluvia. En algunos tramos toda la carretera era un rio de un palmo y donde no había agua te encontrabas ramas, melocotones, manzanas... Que desastre para los agricultores de la zona que en muchos casos han perdido el 100% de la cosecha.
Cuando consigo llegar a Lleida la tormenta ya estaba muy lejos. Una parte de la línea que me había pasado por encima se movía hacia la costa Sur de Barcelona y la otra se alejaba hacia el interior de Barcelona y Norte de Girona. A unos km de Mollerussa me paro a analizar la situación. No tenía nada claro a donde moverme así que me tomé un merecido descanso.
Sobre las 21h empezaban a asomar por el SO unas cortinas de precipitación, en principio inofensivas. Poco después comienzo a ver algún destello y el primer rayo. Todavía había mucha más luz de lo que me hubiera gustado pero cuando iba a sacar la cámara me empiezan a caer gotas. Tenía justo encima algunas cortinas de precipitación y decidí moverme al Este para alejarme de la lluvia mientras iba oscureciendo. Aunque al principio quería ir a Agramunt acabé algo más lejos, en Cervera. De camino había visto algunos relámpagos por el retrovisor, pero muy pocos. Dónde seguía muy activo era por Girona y desde mi posición se veían algunos rayos ya que tras el paso de la tormenta había quedado una visibilidad espectacular. Al parar la actividad por el Oeste busqué otra ubicación más al Este pero con buenas vistas hacia el Sur y Oeste, con lo cual podría ver bien todo lo que viniera de esa zona. Al llegar al parque eólico de la Panadella empecé a ver algunos destellos lejanos, al SE de Lleida, y otro foco se había activado en la zona del delta del Ebro. Pocos minutos después, a las 23:25h, saco las cámaras. Todavía estaban muy lejos pero con el zoom se llega donde haga falta. Y un minuto más tarde...
El primero de la noche ya presagiaba que lo iba a gozar mucho desde ese momento.
La tormenta no era especialmente activa pero la cortina de precipitación era tan densa que incluso en plena noche se podía ver la sombra que producía por donde pasaba.
Pero la alegría duró poco. Unas bandas de nubes bajas se interponían entre los rayos y mis cámaras.
De repente me doy cuenta de la presencia de una cortina de precipitación mucho más cerca y venía directa hacia mí. Lo peor es que en cualquier momento podría comenzar a soltar rayos y estaba en una posición vulnerable. Aun así puse una cámara hacia la zona y tras dos destellos cayó un CG.
No pude dejar mucho más tiempo la cámara aunque no cayó ningún otro a tierra. La otra cámara aún la dejé un poco más con el foco que había más lejos hacia el Oeste. De todos modos la densidad de la precipitación volvía a ser tanta que todo quedaba difuminado.
Y vuelta a llover de forma torrencial. Lo que venían siendo algunos núcleos tormentosos poco activos que arrancaban del Sur de Lleida se estaba convirtiendo en una línea de tormentas que alcanzaría desde el interior de Tarragona hasta casi el pre-Pirineo desplazándose hacia el Este. La extensión de la precipitación hacia el Oeste era de unos 60km por lo que no era viable esperar a que pasase. Tenía que adelantarme por enésima vez. La carretera era un “acuaplaning” continuo hasta la autovía y pero fue un alivio salir pronto para poder moverme rápido. Acabé llegando a Barcelona y tenía tiempo para elegir entre varias ubicaciones buenas. La parte más activa estaba entrando por el Vallés así que me acerqué a Mollet a esperar que llegasen vivas. A las 00:15h ya tenía una cámara mirando hacia el Oeste por donde se veían varios destellos. No había una zona clara a donde apuntar ya que desde la costa hasta el N de mi posición había unos 5 puntos activos. Era cuestión de paciencia pero me caían las primeras gotas. Habrían pasado 3 minutos desde que puse la cámara cuando me doy cuenta de que la sierra de Collserola había desaparecido tras la cortina de precipitación de una tormenta que se había desarrollado justo encima. Rápidamente monto la segunda cámara hacia esa zona y en la primera exposición tras encuadrar y enfocar....
Se produjo algún destello más y un par de buenas descargas antes de que la lluvia me volviese a fastidiar el momento.
Y tras esto el radar me manda directamente a casa. Prácticamente llovía en toda Cataluña y especialmente en la zona de la costa. De camino a casa otra vez conducción muy peligrosa con la autopista muy encharcada y mala visibilidad.
Desde casa estuve viendo algunos rayos espectaculares pero con la que caía no podía hacer gran cosa a parte de esperar a que aflojase e intentar pillar algo cuando se alejase. Al final, la zona activa de la tormenta estaba rodeada de muchos km de lluvia estratificada y cuando se dieron las condiciones para volver a salir de caza dejaron de producirse rayos.
Lo cierto es que aunque durante toda la tarde y noche conseguí varias imágenes interesantes, la sensación es que con pequeños detalles o decisiones podría haber sido una jornada mucho mejor. Por otra parte, llevaba varios meses esperando esta oportunidad para acumular algo más de experiencia en situaciones de tormentas severas como la que se dio. Hasta ahora me había centrado sobre todo en las tormentas nocturnas y estoy empezando a descubrir lo que significa cazar tormentas potencialmente dañinas. Así que en global estoy muy contento con todo lo que experimenté durante una caza de 17h casi sin descanso que pasará a ocupar un lugar permanente en mi memoria.
En cuanto a los vídeos y timelapses, tendrán que esperar un poco más porque hay mucho trabajo de edición que merece una dedicación especial.
