700+km, 29 junio 2016

Quizá el día más largo e interminable de tormentas de todo el año. Sin aviso de ESTOFEX pero con buenas condiciones para el desarrollo de tormentas y tras haberme perdido las tremendas tormentas de la jornada anterior por indecisión, me liaba la manta a la cabeza y a media mañana salía rumbo a Alcañiz. Unas 6h al Sol junto a la ermita de Santa Bárbara me dejaron destrozado. Por suerte la última hora de espera se acercaba por el Oeste una franja de nubes con algo de precipitación que alivió un poco el caluroso ambiente. Poco antes de alcanzarme la lluvia conseguía capturar un rayo pero el viento era demasiado intenso en ese momento y los rayos, pocos, caían por varias zonas.

Al final con la lluvia tuve que desplazarme. Aunque solo llevaba ese rayo el hecho de que el ambiente refrescase ya era algo muy positivo. El nuevo objetivo era subir hacia el Norte ya que parecía que la inestabilidad más productiva se centraría en la zona de Caspe-Bujaraloz durante las siguientes horas.

Llegando a Caspe me acompañaban unos mamatus muy bonitos pero sólo pude disparar un par de fotos desde el coche en movimiento.

Una vez en Caspe me puse en uno de mis miradores en la zona. Las vistas al Sur eran buenas pero hacia el Norte me cruzaban muy cerca varias líneas de alta tensión por lo que si se formaba algo en esa dirección debería moverme rápido. Por suerte la zona Sur fue la que generó algo de actividad y de ahí saqué los primeros rayos de la noche. El viento seguía siendo muy intenso por lo que algunas capturas no tienen el detalle que se esperaría y otra son recortes.

No era nada espectacular a la vista pero me daba por satisfecho, por el momento. Viendo el radar parecía que se formaban algunos nuevos núcleos al Este de Zaragoza y la trayectoria que llevaban los haría pasar al Norte de mi posición. Era el momento de moverse hacia una zona muy concreta unos km al Sur de Bujaraloz. El lugar se identifica fácilmente de día ya que hay un punto geodésico en la entrada del camino pero de noche es casi imposible de ver y menos con las prisas, controlando radar... Como era de esperar me pasé pero sin consecuencias. Pude dar la vuelta cerca y situarme. La tormenta se había metido por detrás de la sierra de Alcubierre pero se movía en paralelo a ella. Ahí conseguí los mejores rayos del día.

La tormenta se movía muy rápida al Este y no generó muchos rayos por lo que, cuando la lluvia estratificada empezó a ser una molestia, me puse a perseguirla hacia Lleida. Acabé en Alguaire, donde había estado unos días antes, con la esperanza de mejorar lo de aquella jornada. Pero no pudo ser. Solo capturé un par de rayos lejanos hacia el Pirineo con la visibilidad bastante mejorable por la humedad que había quedado en el ambiente.

Balance muy escaso para los casi 700km recorridos y la interminable espera de la tarde. El día no dio para más alegrías y el error fue haber salido pensando que se repetiría lo del día 28 o que al menos se acercaría. Se podría decir que salí más por despecho que por lo que decían los mapas y al final casi debería dar gracias por no volverme con las manos vacías.

Alguaire, 24 junio 2016

Día de Sant Joan, posterior a una verbena muy celebrada en Cataluña y con la amenaza de la inestabilidad rondando los últimos años, cosa que puede hacer peligrar las hogueras, pirotecnia y demás. El año anterior las tormentas aparecieron durante la tarde previa a la verbena mientras que en el presente han sido durante la jornada posterior.

Nuevamente nivel 1 de ESTOFEX por granizo grande y vientos severos abarcando gran parte del tercio norte peninsular. La mitad norte de Aragón y la mitad occidental de Cataluña quedaban dentro de la zona en aviso por lo que la situación era interesante para acercarse a la zona. Además existía la posibilidad de que hubiera actividad nocturna y me centré en esa opción.

A media tarde salía de Barcelona con destino Lleida como destino inicial. Al norte de la ciudad ya se veía la tormenta que venía de la zona de Monegros - Somontano y decidí acercarme hasta Almacelles para tener visión limpia de la zona interesante. En la A22, llegando al túnel de la Cerdera, se veían unos rayos crepusculares por encima de la tormenta dignos de haber parado a hacer alguna foto pero no es lo más recomendable en autopista. Finalmente llegaba a Almacelles. Faltaban unos minutos para las 20:30h y la tormenta parecía poco organizada y perdiendo fuerza.

En su desplazamiento iba entrando cada vez más luz solar y el color llegaba a hacer daño a la vista de lo intenso que era. Desde unos km al Oeste debió verse un arcoíris muy luminoso.

Al final un par de rayos ramificándose por la nube, unas cuantas gotas gordas y se acabó. No tenía nada a tiro así que me dediqué a dar unas vueltas por un par de zonas cercanas para inspeccionar la calidad de las vistas y valorar hasta qué punto podrían ser buenas opciones para el futuro. En uno de estos sitios, con el coche parado y mientras me acercaba a pie a un puente cercano se produjeron algunos rayos intranube que quedaron grabados en video.

Y nada, acabé volviendo a la posición inicial en Almacelles. Mientras anochecía parecía que algunos núcleos convectivos iban ganando fuerza, cosa que se confirmaba en el radar. Las últimas luces del día me dieron la oportunidad de capturar los primeros rayos de la noche. Pero como viene sucediendo este año, los mejores se me escaparon por caer fuera de encuadre o por estar manipulando la cámara...

También se vino abajo esta tormenta que no generó más actividad. Pintaba muy mal la noche si todo iba a ser así. Decidí desplazarme al Norte para ver si alguna de las tormentas que descargaban por el Pirineo se dignaba a dejar alguna imagen interesante. Entre Almacelles y Alfarrás me acompañó durante unos minutos una curiosa forma de cara en el cielo. No cuesta mucho de distinguir en el video pese al ruido que genera ya que estaba muy oscuro en ese momento y a simple vista apenas era perceptible.

Al final acabé en el circuito de Alguaire, con unas vistas privilegiadas en todas direcciones. Ya había estado otras veces  en la zona aunque con resultados muy discretos y tormentas lejanas o poco productivas. En esta ocasión llegaba con toda la calma del mundo y con un ojo puesto en un núcleo de precipitación que tenía al Sur bastante lejano. Me moví un poco para buscar el mejor lugar hacia esa zona pero rápidamente comenzaron a caer rayos y ante las prisas me puse donde me pilló, sobre un montículo. En primer plano los montes cercanos y sus árboles me tapaban parcialmente la zona de impacto de los rayos pero no parecía un gran problema.

En su desplazamiento al Este comenzaba a entrar Lleida en el encuadre, aunque parcialmente tapada por los montes.

Finalmente la tormenta dejó de generar actividad y tuve tiempo para comprobar que si desde el principio me hubiera puesto justo a la cruz del Sagrat Cor d'Alguaire no hubiera tenido la molestia de los montes cercanos y además habría tenido toda la ciudad de Lleida en primer plano. A veces es mejor sacrificar un par de fotos por encontrar un encuadre mejor pero cuando empiezan a caer rayos todo se acelera y las prisas se acaban apoderando. Así que me sigue quedando pendiente disfrutar de una buena tormenta desde ese balcón extraordinario al Norte de Lleida.

De Manresa a Masnou, 18 junio 2016

Uno de esos días en que todo pasa demasiado rápido. Las condiciones para presenciar tormentas organizadas estaban presentes. ESTOFEX emitía un aviso de nivel 1 para Cataluña por granizo grande y en cuanto el Sol comenzaba a calentar el aire las primeras tormentas hacían acto de presencia en el Pirineo. La situación era bastante clásica en la época con el eje de una vaguada pasando de Oeste a Este y temperaturas de -22º a 500hPa. El plan era ir hacia el interior y luego improvisar.

Sobre las 12 ya estaba por Manresa investigando nuevas zonas con buenas vistas. Desde una hora antes ya descargaban algunas tormentillas por el Norte de Girona pero lo gordo del día se estaba gestando entre el Pirineo de Lleida y de Huesca. Poco después se consolidaba la actividad en la segunda zona y se desplazaba hacia el Este - SE. Yo iba viendo como la negrura se acercaba aunque algunas montañas me tapaban parte del panorama por lo que tuve que intentar buscar un sitio apropiado rápidamente. Al final se me tiró encima la tormenta y por suerte encontré un campo recién cosechado donde pude meterme. El viento era muy intenso e incluso unos ciclistas se pararon a mi lado y me comentaron que habían visto caer un paracaidista en la autopista. No era la primera vez que podía presenciar los riesgos excesivos a los que se exponen los paracaidistas con el acercamiento de alguna tormenta pero en este caso no vi el suceso aunque unos minutos antes si que había divisado media docena de paracaídas en el cielo.

El caso es que tenía la tormenta delante y mientras intentaba capturar algún rayo sin nada de suerte, con la otra cámara iba componiendo una secuencia de timelapse. Aquí un par de imágenes.

No tuve tiempo para gran cosa. A penas 220 imágenes de secuencia y a refugiarse de la lluvia. No me pude ni plantear sacar la cámara de vídeo porque no creo que hubiera durado mucho en pie. No obstante algunos rayos seguro que hubieran quedado muy bien.

Al final la tormenta entró en modo caos. Una línea de cúmulos creció rápidamente un poco al Sur y se movió hacia el núcleo principal, al Este. Intenté seguir la tormenta hasta Vic pero me ganaba distancia y cuando conseguí llegar ya había perdido toda la estructura. Seguramente me quedaba tapada por la intensa precipitación que en ese momento afectaba a la zona del Montseny. No se podía hacer mucho más. Comenzaba a salir el Sol por el Oeste y ya la ausencia de lluvia impedía la formación de algún arcoíris.

La vuelta a Barcelona fue algo extraña. Cuanto más me acercaba a la zona del Vallés más negro volvía a ponerse e incluso vi algún rayo entre las montañas. Entrando en Barcelona había un arcoíris muy contrastado aunque demasiado bajo ya que al ser temprano todavía el Sol quedaba muy alto. La tormenta ya estaba en el mar así que me moví a uno de los miradores con buenas vistas a esa zona con la intención de seguir el desarrollo "por si acaso".

Los efectos de la intensa precipitación ya se dejaban ver en la desembocadura de las rieras.

En cuanto a la tormenta, algunas imágenes de lo que tenía nada más llegar y 35 minutos más tarde.

No había mucho de donde sacar más allá de otra secuencia del alejamiento de esa tormenta que prácticamente ya ni producía rayos.

Con los timelapses desde Manresa y el último desde Masnou he montado un pequeño vídeo resumen de la jornada.

Si no hubiera sido por los timelapses, este sería uno de esos reportajes que nunca saldrían de mi disco duro. Pero ya que se salva por los pelos he decidido montarlo. Sin duda la velocidad que llevaban las tormentas fue un factor demasiado determinante en el resultado obtenido y redujo al mínimo el tiempo que pude disfrutarlo. Además todo terminó demasiado pronto anulando cualquier posibilidad de rayos nocturnos. Pero así son las tormentas de nuestra tierra...

Madrugando mar adentro, 17 junio 2016

Uno de esos muchos días que se forman tormentas en el Mediterráneo entre Baleares y la península. La noche no tuvo mucha historia. Pocos rayos y la tormenta muy lejana, pero no pude resistirme a quedarme durmiendo en casa.

Entre las 4 y las 6 de la madrugada estuve en la desembocadura del rio Besós intentando capturar alguno de los rayos en la distancia. Pese a que la tormenta no era muy activa las descargas se producían en una zona bastante limitada y eso me permitió cierta sencillez en el trabajo. Mientras tanto, con la segunda cámara capturaba imágenes a intervalos con la intención de montar un timelapse hasta el amanecer. Y este es el resultado.

En cuanto a las imágenes, tampoco hay nada muy excepcional y la distancia además de mi posición junto al mar tiene cierta influencia negativa en el resultado pero, siendo sincero, me esperaba menos.

Otra caza de tormentas rápida. Llegar, montar el equipo, un par de horas y a casa. No me puedo quejar aunque todo es mejorable. Y la oportunidad no tardaría en llegar.

La misma noche del 17 se concentraba de golpe una bestial actividad en la zona de la Costa Brava. Parecía mentira para lo poco que se esperaba en esa zona viendo los mapas y previsiones. Pero el espectáculo que allí tuvieron debió valer mucho la pena. A mí las ironías del destino me llevaron por la zona del Alt Penedés y concretamente a un mirador cerca del cementerio de Les Gunyoles d'Avinyonet. Era la primera vez que iba a ese lugar y podría haber sido un sitio ideal si la meteorología hubiera colaborado. Pero me encontré en un lugar con buenas vistas al Norte y Oeste, por donde se movería la tormenta que pretendía cazar. El problema es que llegué muy pronto y por un hueco entre nubes se veía la impresionante actividad de la tormenta del Norte. Por muy buenas vistas que tuviera en ese horizonte la distancia era superior a los 150km en línea recta y la visibilidad en capas bajas era horrible, como suele ser habitual tras días calurosos y estando cerca de la costa. Así que mientras me lamentaba por no estar en la tormenta del mes comenzaba a ver que por el SO se acercaba la "mía". Llevaba poca actividad pero empezaba a intuirse algo. Las primeras imágenes revelaban una especie de estructura en abalconamiento de varios pisos.

Pero no le quedaba mucha energía a la tormenta y rápidamente comenzó a cambiar perdiendo el aspecto que inicialmente pude ver. Además me enviaron una imagen desde el lado opuesto de la tormenta y parecía mucho mejor. Poco más podía hacer...

Finalmente dejó de producir rayos y aunque aguanté un tiempo siguiendo el desplazamiento de la cortina de precipitación que aún mantenía una intensidad apreciable, acabé por recoger y poner rumbo a casa. Y qué casualidad!!! Habría recorrido 50m de camino pero todavía tenía buenas vistas cuando vi un rayo perfectamente nítido hacia donde había estado apuntando sin éxito hasta minutos antes. La gracia me costó otra media hora de fotos sin ningún resultado.

A veces un pequeño detalle marca la diferencia entre el éxito y el fracaso. Decidir ir al Norte o al Sur. Retirar la cámara o dejarla 5 minutos más. La paciencia es una gran aliada en estas situaciones igual que suele serlo la planificación en su conjunto. De la misma forma que pasaba el día 16 (reportaje anterior) un rayo puede hacer que la noche valga la pena. Y el que perdí en esta ocasión hubiera sido de los buenos. Impacto en una zona de parques eólicos con una cortina de precipitación intensa detrás. Pero quien más o menos se dedica a esto sabe que son muchas veces las que hay que volver con las manos vacías para que, de vez en cuando, se pueda obtener una recompensa mayor.