Ya de camino, en un polígono industrial entre Sant Celoni y Hostalric, hice una parada para tomar las primeras imágenes. Estaba impresionado por la velocidad de desarrollo de los primeros cúmulos aunque tampoco quería perder demasiado tiempo ya que se acercaba un foco más potente a Maçanet y quería llegar a tiempo.
Al llegar a Maçanet, junto al parque de Bomberos de la población empecé a sospechar que había decidido mal y hubiera sido mejor ir a Blanes directamente. No obstante, antes de parar el coche vi un pequeño destello aún con mucha luz ambiente y dediqué unos minutos a intentar capturar algún rayo. Esta era la tormenta que los generaba.
Pero me estaba perdiendo otra mucho mejor....
Sin pensarlo mucho más me planté en Blanes. Al llegar a la cima de una urbanización coronada por una torre medieval tuve que ayudar a una pareja a empujar el coche para encararlo hacia la bajada y que pudieran arrancar ya que se habían quedado sin batería. De reojo vi algún destello pero los estratos se habían extendido por la zona y no se apreciaba ya la estructura de la tormenta. Cuando consiguieron arrancar monté las cámaras y empecé a capturar los primeros rayos. No eran muy vistosos pero suponía comenzar el año "tormentístico" y además en unas fechas muy tempranas.
También se unieron a la fiesta unos fuegos artificiales que salían desde Lloret de Mar. Han quedado algo quemados ya que no tenía la exposición ni el encuadre preparados para ello.
Y coincidiendo con el final de la tormenta cayeron los dos más espectaculares de la noche. Repetidos ya que tenía las 2 cámaras hacia esa zona con diferentes niveles de zoom.
Tras eso sólo vi un destello muy lejano por la zona del Pirineo y varios más sobre el Mar pero tan lejanos que ni forzando la cámara llegaba a detectar nada.
Estuve esperando más de una hora a que se acercase el núcleo de precipitación que venía del Pirineo y aunque tuvo un repunte de la intensidad de precipitación a su paso por Girona finalmente no dejó ninguna descarga más.
De vuelta a Barcelona iba viendo en el radar cómo un pequeño núcleo de precipitación descargaba frente a la costa del Maresme y se iba alejando. Puesto que suelo pasar por algunos buenos miradores al lado de la carretera decidí parar en uno entre Calella y Sant Pol de Mar. Tras unos minutos de espera repasando mapas escuché por AM una descarga bastante más potente que las que estaba escuchando poco antes. Se había activado pero estaba muy lejos. Preparé una de las cámaras y el primero que cayó fue una descarga CG muy brillante que me quemó parte de la escena.
También puse la segunda cámara aunque perdí mucho tiempo encuadrando bien ya que la actividad no era muy constante y no había ninguna referencia en el horizonte.
Y llegó la rareza de la noche. Un rayo que conectaba la base de la tormenta con la parte superior por fuera y que posteriormente lanzaba un potente canal horizontal con un destino incierto. En ese momento no estaba mirando y no lo vi y en las fotos queda cortado por el encuadre en un caso y ni siquiera se registró en el otro ya que la exposición acabó antes de producirse esa fase de la descarga.
Y parecía que poco a poco se iba despejando el horizonte y cada vez tenía mejor visión de la parte superior de la tormenta.
Otro rayo excepcionalmente potente y luminoso impactaba en el Mar y me volvía a quemar la exposición. En la imagen de la cámara que tenía más zoom he conseguido rescatar algo de detalle y se aprecia la violencia de esa descarga.
Y aunque cayeron varias descargas más todas eran idénticas a la última que fotografié.
Tras esto la tormenta se debilitó y dejó de generar descargas. Tenía otra nubecilla creciendo a buen ritmo y siguiendo la misma trayectoria que la tormenta que había estado fotografiando pero tras varios minutos viendo cómo se mantenía sin ganar desarrollo y finalmente se disipaba, decidí poner punto y final a la noche. El resultado fue más o menos el esperado y como viene siendo costumbre en esta época del año, se requiere mucha paciencia para que lleguen los resultados y cuando llegan, muchas veces no es todo lo fotogénico que esperábamos, o sí.
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