Aunque durante la tarde ya había diversos avisos activos algunos modelos veían la posibilidad de tormentas entre Huesca y Lleida y hacia el Pirineo. Esa era mi apuesta ya que después de la caza del 31 me apetecía una buena sesión de rayos.
A media tarde salía de casa en dirección a Lleida con la intención de investigar un par de sitios entre dicha ciudad y Benabarre. El viaje no pintaba muy bien ya que casi todo el camino estaba bajo un cielo plomizo a consecuencia de las tormentas que llevaban horas descargando desde la provincia de Guadalajara, Soria y sector occidental de Aragón.
Al llegar a Alguaire, justo al N de Lleida, estuve dando una vuelta por una de las zonas que quería conocer y perdí demasiado tiempo. Comenzaba a anochecer y por el SO venían algunas cortinas de precipitación poco importantes cuando salta un rayo delante mío a unos pocos km. Corriendo saco las cámaras, apunto y comienzo a tirar fotos. En 5 minutos ya había pillado varias descargas.
Pero el tema no dio más de sí. Comenzó a llover donde estaba y viendo que había nada de actividad me moví hacia el Oeste. Pretendía buscar algún sitio cercano con buenas vistas hacia O-SO ya que comenzaba a ver los primeros rayos de una tormenta que llegaba a Zaragoza. Pese a la enorme distancia, las bases de las tormentas tenían mucha altura lo cual hacía que desde muchos km se viesen los rayos perfectamente. Al final me fui liando y acabé llegando a Almacelles para luego seguir hasta Monzón. Desde un sitio un poco elevado tiré varias fotos mientras analizaba cómo se estaba moviendo todo.
Como el sitio no era muy bueno y la tormenta aún muy lejana decidí desplazarme a otro mirador que pensaba que estaba en la siguiente salida de la autovía hacia Huesca. Resulta que no, ese lugar estaba más al Este y mientras me acercaba a Huesca acabé parando en Barbastro, a una salida de El Pueyo. El sitio era lamentable y no estuve muy acertado con los encuadres aunque alguno cayó dentro. Ese pico que se ve con unas luces y unas antenas es el santuario de El Pueyo.
Y harto de todo me acabé subiendo al Santuario. Tenía que haber estado ahí arriba desde el primer momento y la noche hubiera sido de las más épicas que se pueden tener. Por desgracia, cuando llegué ya empezaban a caer las primeras gotas y el poco tiempo que estuve allí no me permitió sacar mucho material.
Al final con los rayos pasando por encima me fui de allí. Quería volver hacia el Este para moverme por delante de la tormenta. Durante las anteriores horas las tormentas se habían estado desplazando de SO a NE avanzando muy poco hacia el Este, pero ahora les había dado por acelerar hacia Lleida. No había manera de salir de la lluvia y acabé en Almacelles viendo llover y sin poder hacer nada.
El frente de tormentas que me afectaba venía con una gran extensión de precipitación, síntoma de que se debilitaba y aunque no se podía descargar una reactivación me parecía más interesante otra línea de tormentas que subía hacia Zaragoza. Tenía que volver a decidir si esperarla o acercarme y aunque la decisión fue lo segundo, sólo me moví un par de salidas, casualmente al lugar que pretendía ir cuando me fui de Monzón. Quería volver a El Pueyo y menos mal que no lo hice porque poco tardó en llegar la precipitación a esa zona. Lo ideal hubiera sido no haberme ido antes de esa zona, pero en la situación actual ya no valía la pena.
Nuevamente una consulta rápida a radares y satélite y ya volvía a ver destellos a lo lejos. Saqué la cámara y sólo se salva uno.
Aunque el sitio era muy bueno para tormentas que vienen por el S-SO, hacia el N-NO tenía arbustos y cables eléctricos por todos lados. Por eso acabé un poco más a Este, en un puente sobre la autovía, y con vistas bastante mejores.
Cuando ese núcleo dejó de soltar rayos eran ya la 4:30h. Hacía rato que hacia el Este veía actividad y me desplacé hacia allí para ver si aún tenía suerte. Conforme me acercaba, los focos que quedaban activos estaban en la costa de Tarragona. Demasiado lejos. Por ello seguí en dirección a Barcelona donde la tormenta que venía del Sur acabó descargando algunos litros y varios rayos. Cuando llegaba, a las 6:30h, había demasiada luz para intentar algo y ahí acabó la caza para mí.
Aunque la previsión me falló un poco por la zona que esperaba, el mayor error fue no haber ido directamente a El Pueyo cuando acabó la tormenta de Alguaire. Hubiera tenido al menos una hora de rayos espectaculares en vez de los ratos sueltos en sitios malos que tuve. Lo pensé varias veces, pero creía que al llegar estaría lloviendo y eso fue lo que me pasó por tardar tanto en decidir. A veces hay que tomar decisiones arriesgadas para obtener los mejores resultados y seguirlas con determinación. En este caso hice lo contrario. Muchas decisiones, muchos cambios de idea y poca determinación. Pero como tampoco estamos hablando de una ciencia exacta, lo que me hubiera valido en esta ocasión posiblemente me penalizaría en otras. El factor suerte tiene mucho peso en la ecuación.
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